Pocas ocasiones se tiene la fortuna de convivir con expertos y amantes de los vinos, menos aún con los responsables de la elaboración y el proceso de una botella, que lo mismo, disfrutas en una charla informal, que en una celebración importante.
Una de las bondades de esta profesión y actividad, es que nos permite conocer gente que transmite la pasión por lo que hace y como muestra, una probadita de lo que produce Barón Balché, en el Valle de Guadalupe en Baja California.
Elegir cuál será el vino que conmemoré el 90 aniversario de un organismo, no es nada fácil, pero el hacerlo con apasionados de la industria, ayuda a que la experiencia sea más amena.
Escuchar la sencillez de Juan Ríos, presidente de las Bodegas Barón Balché, la experiencia su Enólogo Jesús Rivera y las recomendaciones del Sommeliere Oscar Castillo, hacen que una cata con los responsables de esta importante vitivinicultora de nuestro país, sea inolvidable.
La experiencia es única, más cuando degustas tres tipos de vino aún sin terminar de las siguientes uvas: CARIGNAN, GRENACHE y ZIFANDEL, he de confesar que ésta última, a pesar de no ser de mis favoritas, me dejó una agradable sabor de boca y equilibrio.
Si en condiciones normales para muchos resulta complicado encontrarle los sabores y aromas a los vinos, en productos sin terminar puede resultar más difícil realizar la cata, pero con la dirección de los creadores, disfrutar de esta cata resultó un paso relativamente sencillo.
Entre la CARIGNAN y la GRENACHE, elegí la primera pues me resultó muy equilibrada en naríz y boca, con aromas de frutos rojos, frambuesa, cereza e higo.
La decisión de cuál era la mejor uva, que conformaría el vino del 90 aniversario de la AMHM A.C., se tornaba más complicado al analizar otros factores que tenían que ser tomados en cuenta para la elección, la gran complejidad de paladares y gustos a los que llegará este vino, así como las costumbres y gustos de quienes lo disfrutarán.
Barón Balché se ha caracterizado en estos últimos años por producir y elaborar tres tipos de productos: la línea jóven (Rincón del Barón) la línea media (Barón Balché) y la línea premium (Balché).
Ya para concluir esta cata, pudimos disfrutar de uno de los vinos Premium, el Balché 2012, 100% Syrah, de un gusto estructurado y con un final de gran permanencia. De color rojo cereza y un aroma complejo entre frutos y bálsamo, este gran vino es sin duda una excelente opción para celebrar en ocasiones especiales, incluso se presta para una alta guarda.
Balché fue una bebida sagrada en la cultura Maya, con ella se rendía culto a los Dioses. Hoy en día los responsables de esta casa Vitivinícola, rinden un merecido culto al vino mexicano, donde a través de la comunión con la naturaleza, pasión y ganas por hacer las cosas se demuestra en sus vinos.
Finalmente agradezco a Lorenzo Forfet de la Última Copa, todo el apoyo para lograr y tener esta cata con magníficos productores.
Aquí les dejo la Ficha Técnica de:
BALCHE DOS MIL DOCE
SYRAH
En la búsqueda de
lograr los sabores de la tierra mexicana a través de la enología. Creado un
vino que sintetiza nuestro aprendizaje y evolución enológica decidimos llamarle
BALCHE 2012 festejando tan importante acontecimiento, decidimos hacer un vino
que guardara la esencia de nuestra casa,
Celebrando Diez años
de Enología con sabor a México
VARIEDAD: 100% SYRAH
NOTA DE CATA
VISTA: Rojo violáceo
con matices intensos, de capa alta y con una gran limpieza y brillo
NARIZ: Nariz franca,
elegante y compleja; sobresalen las notas a grosella, ciruelas pacificadas,
menta, tabaco, cacao, clavo y un final a tostado.
GUSTO: De estructura y
un balance entre acidez y alcohol, con un retrogusto complejo, sobresalen las
notas de frutos maduros, de persistencia larga y una tanicidad elegante.
MARIDAJE: platillos
estructurados, con alimentos ricos en grasa o carnes como rib eye, chuletas de
cordero, pato en diversas formas, codornices y alimentos con toques ahumados
Zona de producción: Valle de Guadalupe ensenada México.
Fermentación: Con temperatura controlada
Duración: 15 días
Alcohol: 13.5°
Añejamiento en barrica: 24 meses
Temperatura de consumo: 17°-19°
Potencia de guarda: 12-15 años
Nota: Vino de larga guarda, en donde su evolución se va incrementando con el paso del tiempo
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